Santiago en realidad consiste en dos volcanes fusionados: un volcán de escudo típico en el extremo noroeste y un volcán de fisura lineal bajo el extremo sureste. Como es el caso en muchos lugares de Galápagos, la vida es abundante cerca de la costa. Los lagartos de lava son comunes en muchas partes de Santiago, así como en otras islas. Las iguanas marinas , los brillantes cangrejos rojos , el pingüino de Galápagos, los piqueros de patas azules y la garza de lava estan presentes. Desafortunadamente, la vegetación en el interior de la isla ha sido diezmada por las cabras salvajes, estimadas en un número de hasta 50,000 o más. Las cabras han habitado Santiago al menos desde 1813 cuando el Capitan Porter del USS Essex permitió que cuatro de ellas escaparan. La pérdida resultante de fuentes de alimentos amenaza no solo la vegetación nativa sino también a los animales nativos como la tortuga gigante y la iguana terrestre.