Punta Cormorán: Floreana fue la primera capital de las Galápagos y donde Charles Darwin conoció al Gobernador de las islas. Su pequeña laguna salobre suele albergar flamencos, zancos y patos de cola blanca, y una de sus playas es un lugar de anidación muy utilizado por las tortugas marinas. Fíjese en la arena de color verde en el lugar donde desembarca. Las opciones de excursión incluyen un paseo relativamente corto hasta la laguna y la playa de anidación de tortugas marinas, y la posibilidad de practicar snorkel y nadar en la playa de desembarco.
Islote Champions: Este islote ofrece una magnífica oportunidad para vivir aventuras en el océano. Cuando se práctica el snorkel, abundan los peces tropicales y es frecuente ver tortugas marinas, rayas, tiburones, estrellas de mar y leones marinos si están de humor para jugar. En un paseo en zodiac por la costa rocosa, no pierda de vista a las aves marinas, como piqueros, pelícanos y fragatas. Los pájaros tropicales de pico rojo anidan en las grietas debajo de los cactus espinosos. El raro ruiseñor Charles también tiene su hogar aquí. Opción de excursión: snorkel avanzado.
Bahía de Correos: Este lugar, cargado de historia, alberga el barril de la oficina de correos establecido hacia 1793, donde piratas, bucaneros, balleneros y otros podían dejar su correo para que lo recogieran los barcos que salían. La tradición continúa hoy en día, ya que los visitantes dejan tarjetas postales con dirección en el barril y clasifican el correo que queda para entregarlo en casa.
Mirador de la Baronesa: El Mirador de la Baronesa es el lugar ideal para contemplar el paisaje único que define a Floreana y conocer la intrigante historia de la isla, habitada en su día por una indulgente baronesa y sus tres amantes. Durante el paseo en zodiac alrededor de "La Lobería", se pueden observar varias especies marinas como rayas águila dorada, tortugas marinas, leones marinos, lisas y ocasionalmente pingüinos de Galápagos.