Leones y lobos marinos de las islas galápagos

Leones marinos

Los leones marinos viven en grandes colonias. Los machos adultos, son la cabeza de la colonia. Estos ejemplares alcanzan los 2 m de longitud y 363 kg de peso. A medida que los machos crecen, luchan por el dominio y por un territorio que incluye un harén de entre 5 y 25 hembras. Los líderes de las colonias son dominantes lucharán contra cualquier intruso que entre en el territorio.

Cada hembra del harén tiene una sola cría que nace un año después de la concepción, es decir pueden tener una sola cría por año. Las crías tienen un fuerte vínculo con su madre. La madre cría a su cachorro hasta tres años. En ese tiempo, la madre y el Cachorro reconocerán el llamado del otro diferenciándolo del resto de la Colonia.

Las madres se llevan a los cachorros al agua mientras los amamantan. Cuando la cría tiene entre 2 y 3 semanas, la hembra se aparea de nuevo. Dentro de la colonia, las crías de león marino viven juntas en una especie de guardería. Las crías pueden verse juntas durmiendo la siesta, jugando y alimentándose. Es común ver a una hembra madre "cuidando" a un grupo de cachorros mientras las otras hembras van a alimentarse.

Los leones marinos de Galápagos son especialmente vulnerables a la actividad humana. Su naturaleza inquisitiva y social les hace más propensos a acercarse a zonas habitadas por humanos, a entrar en contacto con residuos humanos y con redes y anzuelos de pesca. Los leones marinos pueden verse por todas las islas. Practicar snorkel y kayak con las juguetonas crías suele ser lo más destacado de una visita a las Galápagos.
 

Leones Marinos de Galápagos
Foto: Canva - vau902

¿Dónde Encontrarlos?

  • Isla Santa Fe

  • Isla Española: Costa de Punta Suárez

  • Isla San Cristobal: Playa de Cerro Brujo y Playa de La Lobería

  • Isla Genovesa: El Barranco y Bahía Darwin

Lobos Marinos

Existen dos especies de lobos marinos en Galápagos: el lobo marino común (Zalophus wollebaeki) y el lobo marino de dos pelos (Arctocephalus galapagoensis). Ambas especies son endémicas de la región y tienen diferencias en su apariencia física y comportamiento.

A diferencia de otros lugares, los lobos marinos de Galápagos no son tímidos y muestran una curiosidad inusual hacia los seres humanos. Es común verlos jugando cerca de la costa y mostrando interés en los buzos y visitantes que se acercan a ellos. Sin embargo, es importante mantener una distancia adecuada para no alterar su comportamiento natural ni perturbar su hábitat.

Son animales sociales y pueden formar colonias grandes en las playas y rocas de las islas. Pasan gran parte de su tiempo en el agua, donde son ágiles nadadores y cazadores, alimentándose principalmente de peces y calamares. Cuando no están en el mar, los lobos marinos suelen descansar y tomar el sol en las playas.

La temporada de apareamiento de los lobos marinos de Galápagos suele tener lugar entre junio y diciembre, variando ligeramente según la especie y la ubicación geográfica en las islas. Durante esta época, los machos establecen territorios en las playas y rocas donde planean atraer a las hembras. Compiten entre sí para establecer su dominio y cortejan a las hembras a través de comportamientos como vocalizaciones, movimientos corporales y mostrando su melena característica.

Después del nacimiento, las hembras amamantan a sus crías con leche rica en grasas durante un período de aproximadamente 6 meses. Durante este tiempo, las madres deben dejar a sus crías solas en la playa mientras se aventuran al océano a buscar alimento, y regresan periódicamente para alimentarlas.

Lobos Marinos Glápagos
Foto: Canva - HIROMASA ARAKI

¿Dónde Encontrarlos?

  • Isla Fernandina

  • Isla Isabela: Punta Vicente Roca y Tintoreras

  • Isla Santa Fe

  • Isla San Cristóbal: Punta Pitt y La Lobería

  • Isla Floreana